Otro de los ámbitos de intervención del educador social es la Gestión cultural y artística.
Sin duda, éste ámbito es de gran importancia para el desarrollo intelectual de las personas que habitan en una comunidad.
Gracias a esto, fomentamos que se conozca la riqueza cultural y artística de nuestro entorno de una manera amena. Pero para que ello sea posible, la información debe adaptarse a las circunstancias y a los receptores de la información. Por ejemplo, no es lo mismo elaborar un mural sobre un monumento de nuestra ciudad con un grupo de niños de Educación Primaria, que con un grupo de mayores en un centro de día.
La labor del educador social en esta tarea, junto con la colaboración de otros agentes educativos y sociales, es imprescindible para logar los objetivos propuestos.
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